¿Qué es el ardor de estómago? Diferencia entre ardor y reflujo
Ardor en la garganta, quemazón en el pecho, dolor en la boca del estómago… muchas personas experimentan estos síntomas a menudo, especialmente, tras las comidas. ¿Pero a qué se deben?, ¿es necesario acudir al médico o pueden tratarse siguiendo algunos sencillos consejos? Empecemos aclarando algunos conceptos porque a veces se confunden:
- acidez estomacal: sensación de ardor en el pecho, que a veces se irradia hasta el cuello o la garganta y que puede llegar acompañada de un sabor agrio o amargo y de eructos. En terminología médica también se le llama pirosis (del griego piro-, ‘fuego’) y es debida al reflujo gastroesofágico.
- reflujo gastroesofágico: también llamado reflujo ácido, ocurre cuando los ácidos de los jugos digestivos del estómago refluyen por el esófago (tubo que va de la boca hasta el estómago y que tiene como función transportar lo que comemos hasta este órgano para que pueda ser digerido). La subida de estos jugos causa varios síntomas y puede llegar a inflamar la mucosa del esófago, provocando esofagitis, entre otros problemas. Si este reflujo ácido no ocurre de forma puntual sino recurrente, puede dar lugar a la enfermedad de reflujo gastroesofágico (ERGE) y afectar seriamente la calidad de vida de quien la sufre.
Síntomas principales del ardor de estómago
La acidez estomacal causa numerosos síntomas; seguidamente, los repasaremos:
- malestar estomacal.
- dolor en la boca del estómago, especialmente después de comer.
- sensación de ardor o quemazón en el pecho.
- ardor en la garganta.
- regurgitación (sabor agrio o amargo en la boca como consecuencia de la subida del ácido gástrico).
- eructos.
Aunque no es muy frecuente, a esta lista de síntomas también debemos añadir la disfagia, una de las complicaciones del reflujo gastroesofágico que consiste en dificultad para tragar los alimentos.
En cuanto a la intensidad y duración de los síntomas, pueden variar de paciente a paciente (algunos pueden experimentar pocos, mientras que otras personas quizás sientan más molestias) y durar de unos minutos hasta varias horas.
Cómo aliviarlos
Para aliviar los síntomas que provoca el reflujo gastroesofágico, podemos poner en práctica algunas medidas que tienen que ver con la alimentación, el estilo de vida y los hábitos que seguimos. Son las siguientes:
- mantén unos horarios regulares: seguir un orden en las comidas, en lugar de ir picando a deshoras y no tener un horario fijo, te ayudará a evitar el reflujo y la acidez.
- come alimentos que neutralicen la acidez y descarta los que la causan: aprende a comer bien con alimentos saludables que te ayuden con tus problemas estomacales y evita los que tienen más ácido.
- evita comidas copiosas y come masticando lentamente: de esta forma, favorecerás una buena digestión y evitarás la pesadez de estómago. También es preferible que hagas pequeñas comidas varias veces al día, en lugar de pocas y muy abundantes.
- come dos o tres horas antes de dormir: dado que por la noche estamos más inactivos, intenta favorecer la digestión cenando dos o tres horas antes de acostarte.
- haz ejercicio suave con regularidad: el ejercicio ayuda a aumentar el metabolismo y acelera el proceso digestivo, estimula el tránsito intestinal, mejora los síntomas digestivos asociados al estrés y permite controlar el apetito, entre otros beneficios.
- descarta la ropa muy ceñida a la cintura: intenta no llevar prendas que opriman esta parte del cuerpo para no aumentar la presión abdominal.
- duerme con la cabecera de la cama inclinada y sobre el costado izquierdo: esta posición evita el reflujo ácido y favorece el descanso.
- toma un protector gástrico por la mañana: estos productos pueden resultarte de gran ayuda para combatir la acidez estomacal que causan las comidas copiosas o ciertos alimentos y bebidas. Los protectores estomacales actúan bloqueando la producción de ácido en el estómago, que es el que irrita el esófago cuando sube por el tubo digestivo y produce la sensación de ardor en el pecho y, a veces, regurgitación. Recuerda que debes tomarlos por la mañana para estar protegido las 24 horas, pero no de forma habitual, sino solo puntualmente.
Los síntomas del ardor de estómago incluyen malestar, sensación de ácido en la garganta y en la boca, dolor en la boca del estómago y eructos.
Conclusión
Para terminar, ahora ya conoces la diferencia entre el reflujo gastroesofágico y la acidez estomacal. Ambos están relacionados, ya que el reflujo causa la acidez, y provocan síntomas incómodos a quién los padece, como ardor o quemazón en la garganta y en el pecho, dolor en la boca del estómago, malestar, eructos y regurgitación. Para aliviar estos síntomas puedes poner en práctica varias acciones, como comer alimentos que neutralicen la acidez y evitar aquellos que la provocan, evitar comidas copiosas y hacer ejercicio suave de forma regular, entre otros. Si no quieres estar siempre sufriendo por los problemas digestivos, ¡ponte en marcha y gana la partida al reflujo y a la acidez!
